7: Alumbrado y Señalización Óptica

7.1 Las luces

Todos los vehículos deben estar equipados con un conjunto de luces para que puedan ver y ser vistos por otros usuarios cuando conducen en la oscuridad o reducen la visibilidad, y pueden advertir a otros conductores en ciertas maniobras.

Los vehículos motorizados deben poseer activas las siguientes luces exteriores.

7.1.1 Luces obligatorias en la parte delantera

En Colombia no se regula la intensidad de los bombillos de las luces de servicio, pero se recomienda en las de filamento, no superar los 55W (Vatios). Intensidades mayores, aparte de requerir adiciones a la instalación eléctrica, pueden afectar a los conductores o aumentar la temperatura de las partes (la mayoría ahora son plásticas) y dañarlas, o lo peor, calentarlas tanto que pueden incendiar las partes plásticas y con ellas, el vehículo. 

• Dos luces intermitentes, de alerta por emergencia o estacionamiento y dos luces direccionales (una por lado). Este conjunto puede tener los mismos bombillos para ambas funciones.
• Las luces medias o de cruce tienen un haz afilado y asimétrico (no se reparte la luz igual hacia los lados o arriba) y por eso iluminan mejor que las exploradoras, generalmente redondas, que sólo proyectan un chorro delgado de luz hacia adelante.
• Dos faros que proyecten luces media (o de cruce) y alta (o luz de carretera) de color blanco. Estos se denominan luces de servicio. Las luces de color amarillo, que se usaron como equipo de serie en vehículos franceses hace años, ni se fabrican ya ni iluminan igual que las blancas, pero si son originales, se consideran permitidas. No cambie el color de los faros del vehículo por capricho, verá menos que lo que necesita. 

7.1.2 Luces obligatorias en la parte trasera

• Dos luces intermitentes de alerta o estacionamiento y dos luces direccionales (una por cada lado).
• Una luz blanca que se activa al momento de dar marcha hacia atrás.
• Dos bombillos de luz roja y media luminosidad para mostrar la posición de los extremos del vehículo.
• Dos bombillos de luz roja que se activen al momento de frenar.
• Dos luces blancas que iluminen la placa del vehículo.
• Una tercera luz de freno ubicada al centro de la parte trasera del vehículo.

Algunos vehículos tienen una o dos luces traseras de color rojo brillante para que otros conductores sepan de su presencia, cuando hay niebla, en la temporada de otoño e invierno o en un tramo muy oscuro de la carretera donde su visibilidad es baja. A pesar de existir esa luz hay una forma segura de evitar embestir un vehículo detenido o que marche delante de usted en condiciones de baja visibilidad: vaya despacio, no lleve el vehículo a un sitio que no ve, asegure tener una buena distancia y una velocidad prudente, así la luz anti niebla será un complemento y no la única alerta disponible.

7.1.3 Consejos para la operación de las luces

Cada vez que vaya a conducir su vehículo asegúrese que sus luces estén limpias y que todas funcionen correctamente y siga las siguientes recomendaciones:

1. Verifique que las luces delanteras estén correctamente alineadas, ya que un mal ajuste puede encandelillar a los demás conductores y minimizar su iluminación. Para lograr una correcta alineación estacione el vehículo perpendicular a un lugar plano a diez (10) metros de una pared y encienda las luces medias. Luego, verifique que la altura de la luz proyectada no sea superior a la altura del centro de los faros al suelo.
2. Mantenga siempre en su vehículo un repuesto por si en algún momento llega a fundirse uno de los que está utilizando. En la mayoría de los manuales del conductor existe un capítulo que le enseñara como debe alinear las luces correctamente. Sin embargo, hay vehículos en que el sistema sólo puede ser graduado por un técnico y si usted los interviene, puede provocar un daño, así que: lea el manual y entérese.
3. Trate de que las luces intermitentes y direccionales sean de color amarillo, esto se debe a que los demás conductores aprecian más rápido este color y no se confunden con las luces del freno.
4. Si se lleva muy cargada la parte de atrás del vehículo, la parte delantera se levantará y los faros apuntarán más arriba de lo normal.
5. No experimente con las luces de su vehículo, no use colores, formas ni bombillos diferentes.
6. Nunca cubra ni ahúme las luces traseras ni las delanteras con ningún tipo de material, lo único que logrará es que en los días muy soleados o cuando las mallas estén deterioradas los demás vehículos no vean su acción de frenado y no alcancen a detenerse. 
7. No circule detrás de otros vehículos o con tráfico en sentido contrario, haciendo uso de las luces de carretera (altas). Sepa diferenciar los haces de luces altas para no molestar a los demás. 

7.1.4 Luces auxiliares o exploradoras 

Por lo general, muchos vehículos además de contar con las luces anteriormente señaladas están provistos de luces auxiliares o exploradoras. Estas normalmente vienen provistas por el fabricante y solo sirven para iluminar el área frontal del vehículo.  

El uso de luces exploradoras de manera continua y sin usar las luces de servicio, hace que el conductor no tenga buena iluminación hacia delante, y que se fije solamente en el área iluminada por las exploradoras generando una pérdida de espacio y tiempo de reacción.

Las luces exploradoras centrales, que van a la misma altura de los faros del vehículo deben usarse al igual que las altas (sólo cuando nadie esté adelante o acercándose en sentido contrario). No haga experimentos con las luces, su instalación debe hacerse sólo en talleres autorizados o sitios distribuidores de accesorios reconocidos, en que los técnicos han recibido alguna formación de los fabricantes del vehículo o de las luces mismas.

7.1.5 Luces intermitentes, de estacionamiento o de alerta  

Estas luces se deben utilizar cuando el vehículo se encuentre detenido ya sea por una falla o avería, así como también para advertir a los conductores que vienen detrás suyo de algún tipo de obstrucción que se presente más adelante.  

Recuerde que deben usarse solo el tiempo que sea necesario para que los demás noten su advertencia, nunca como una advertencia de un estacionamiento en un lugar prohibido.

7.1.6 Las luces direccionales y las luces del freno

Asegúrese que las luces direccionales y luces de freno funcionen correctamente y estén limpias, esto le ayudará a ser más visible de noche y a alertar a los demás conductores de cualquier maniobra que vaya a realizar.

7.1.7 Los parabrisas y los espejos

Cuando es de noche, las luces altas pueden hacer que cualquier suciedad que se encuentre en los parabrisas y espejos produzcan un resplandor inesperado que le estorbe o disminuya la visión mientras conduce. 

La mayoría de personas ha experimentado al ir manejando hacia el sol, se reduce la visibilidad a través de un parabrisas que en pleno día, parecía estar en buenas condiciones. Para manejar de noche con seguridad, el parabrisas debe estar limpio por dentro y por fuera. Mantenga lleno el depósito del limpiaparabrisas o recárguelo al menos semanalmente.

7.2 La iluminación deficiente

Es importante la buena iluminación al momento de conducir, en el caso de la noche algunas zonas pueden tener excelente iluminación, pero otras no.

Aun cuando haya luces, el escenario del camino puede ser confuso: hay dificultad para ver las señales y los riesgos del tránsito vehicular. Maneje lo suficientemente despacio para tener la seguridad de detenerse dentro de la distancia que alcanza a ver frente a usted.

7.2.1 La luz de los faros

El cuidado y el buen mantenimiento de la luz de los faros es importante durante la noche, es la principal fuente de luz que usted puede tener para que los demás vehículos lo vean.

La luz media bien alineada y con las cubiertas de las luces de servicio limpias le permite ver hasta unos 75 metros adelante, la alta o de carretera, hasta una distancia entre los 105 y los 150 metros. Por ello, debe ajustar la velocidad para que su distancia de parada se mantenga dentro de la distancia de su visión, lo cual significa ir suficientemente despacio para poder parar dentro del alcance de la luz de los faros. De lo contrario, en el momento en que ve un peligro, ya no tendrá tiempo de detenerse.

Las luces de los faros están diseñadas para iluminar sectores anchos y cortos a la izquierda, y estrechos, pero más largos a la derecha, en la siguiente ilustración se muestra el uso correcto para que el conductor vea adecuadamente durante la noche a una velocidad prudente:

Conducir de noche puede ser más peligroso si los faros están dañados en mal estado, incluso si usted conduce con los faros muy sucios le reduce la capacidad de ver lo que pasa en el camino.

Además tenga en cuenta que estos pueden estar desalineados; si no apuntan en la debida dirección, no darán la visibilidad que necesita y podrán cegar a otros conductores. Hágalos alinear y revise que estén debidamente ajustados. Generalmente los manuales del conductor de cada vehículo le indican cómo hacerlo (léalos para aprender, y tal vez, enseñar a otras personas).